“La Máscara” es, sin lugar a dudas, una de las películas más recordadas dentro de la exitosa carrera cinematográfica del polifacético actor Jim Carrey (que participa hasta en la realización de la banda sonora).
Hoy, en «Todo Acción«, repasamos este clásico de la comedia estrenado en 1994.
La historia de «La Máscara»
Los dos se complementan perfectamente en la historia de un tímido y solitario oficinista (Stanley Ipkiss) apasionado por las caricaturas que se ve constantemente humillado por sus superiores e ignorado por las personas que le rodean.
Solo su perro Milo y su compañero Charlie (interpretado por Richard Jeni) parecen capaces de darle un mínimo de cariño.
Sin embargo, el descubrimiento en el fondo del océano de una máscara (y su posterior aparición en la ciudad) y los planes de Charlie para atracar el banco en el que trabaja harán que la vida de Stanley se convierta en un huracán de aventuras y pasiones.
¿El motivo? La capacidad de la máscara para sacar su lado más oculto e inducirle a hacer lo que desea siempre que se la pone.
La película continúa con la aparición de Tina Carlyle (Cameron Díaz), la novia del mafioso Dorian Tyrell (Peter Greene) y dueño del Club Coco Bongo (donde vemos algunas de las escenas más destornillantes del film).
Una hermosa mujer que roba el corazón a Ipkiss y que juega un papel fundamental en la historia al ayudarle a evitar los atentados orquestados por su novio mafioso.
El éxito de «La Máscara»:
La cinta, dirigida por Charles «Chuck» Russell, fue estrenada el 28 de julio de 1994 y, además de confirmar el estrellato de su pareja protagonista (Jim Carrey y Cameron Diaz) supuso uno de los mayores éxitos (a nivel de taquilla) del cine de Hollywood en la década de los ´90 con un presupuesto de 18 millones de dólares y una recaudación mundial de más de 350 millones de dólares.
Magníficos datos para la cuarta película más taquillera en un año que contó con el estreno de superproducciones de la talla de “Forrest Gump” o “El Rey León”.
El guión de la película:
Otro aspecto por el que la película destaca y sigue siendo un referente dentro del cine cómico (a pesar de sus más de 25 años de “edad”) es el sorprendente y divertido guión de Michael Fallon y Mark Verheiden, basado (muy libremente) en el cómic creado en 1982 por Mike Richardson, la editorial Dark Horse Comics y donde constantemente se rinde homenaje al mundo de la viñeta.
De hecho, hasta el nombre del personaje protagonista (Stanley) se consideró en su momento una referencia a Stan Lee (creador del universo Marvel) en medio de una historia que combina lo absurdo (una máscara que transforma a las personas y a los animales en criaturas con superpoderes) con lo mundano (un protagonista tímido y trabajador preocupado en no cometer errores).
La fotografía, el maquillaje y los efectos visuales:
Tampoco se puede pasar por alto la magnífica plasticidad y colorido que la fotografía de John R. Leonetti da a los 101 minutos de metraje y permiten al film crear esa sensación de “cómic en vivo” o los efectos Visuales, capaces de caricaturizar los dibujos de Tex Avery (creador de “La Máscara”) con imágenes reales.
Un auténtico desafío técnico para la época en la que se realizó y en el que la sensacional labor de Raul Essig no se vió justamente recompensada.
Así, en galas como la de los Oscar de Hollywood de 1994 el premio a los mejores Efectos Visuales fue a parar a la ya mencionada “Forrest Gump”.
Algo muy difícil de justificar a día de hoy si comparamos la relevancia que ambas películas han alcanzado con el tiempo dentro de la industria de los efectos especiales.
Factores como el maquillaje (en manos de Greg Cannom y Roland Blancaflor), el vestuario (Ha Nguyen) o la banda sonora de Randy Edelman (mezcla de los clásicos del cine negro y la música latina de los años ´50) brillan también en la que podemos considerar una de las “comedias familiares” más atrevidas que ha sido capaz de ofrecernos el cine en toda su historia.
Escenas míticas de «La Máscara»:
¿Acaso alguien recuerda escenas tan divertidas como la del baile de la Máscara en el Coco Bongo o la del desenfrenado Stanley Ipkiss recibiendo el Oscar? Yo, sinceramente, no.
Pero lo que también sería una injusticia a nivel artístico es subordinar todo el mérito del éxito de “La Máscara” a sus aspectos técnicos y a la fecha de su estreno ya que, si hay algo que se sigue echando en falta de la primera película es el sorprendentemente histriónico trabajo de Jim Carrey (un actor constantemente perseguido por el éxito… y la polémica) y la carismática presencia de Cameron Díaz.
Todo acción con el cine de comedia:
Como buen cine de entretenimiento que supone ser La Máscara, en nuestro blog apostamos por el mejor cine de comedia, de modo que esperemos que te haya gustado esta entrada.
Echa un vistazo a nuestro último post sobre el análisis de la trilogía de John Wick.
¡Hasta la próxima!